Por: Gustavo Puentes

Valeria Márquez, conocida como "Valeria Tiktoker", fue asesinada durante una transmisión en vivo en TikTok en Zapopan, Jalisco, presuntamente por su expareja.

El martes pasado, la comunidad digital de México quedó estremecida tras el brutal asesinato de Valeria Márquez, una joven influencer de 23 años. Mientras interactuaba con sus seguidores en TikTok, Márquez fue atacada a tiros dentro de una estética de su propiedad en Zapopan, un área metropolitana de Guadalajara conocida por su creciente violencia.

Valeria, también conocida en las redes sociales como "Valeria Tiktoker", había adquirido notoriedad por sus contenidos de belleza y estilo de vida. Según reportes preliminares, el atacante era un motociclista que se presentó bajo el pretexto de entregarle un regalo, para luego dispararle repetidamente.

El incidente ocurrió en un contexto preocupante, ya que horas antes del ataque, Valeria había expresado temores sobre su seguridad. Reveló que había tenido problemas con su exnovio, un presunto sicario del Cártel de Jalisco Nueva Generación, quien, según ella, había influenciado su expulsión de una discoteca días antes.

Este crimen no solo destaca la vulnerabilidad de los influencers ante la violencia, sino también la complejidad de las relaciones personales entrelazadas con figuras del crimen organizado. La tragedia ha reavivado el debate sobre la seguridad en las redes sociales y el impacto del narcotráfico en la vida cotidiana de los jóvenes en México. La comunidad y la familia de Márquez claman justicia, mientras las autoridades continúan investigando el móvil y buscando al responsable del homicidio.