Por: Miguel Angel Trujillo

Brutal agresión a una menor indígena emberá en Pueblo Rico, Risaralda, ha generado el rechazo unánime del ICBF, la CNMI y la Gobernación. Se activó protección para la víctima y se anunciaron acciones legales.

El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Comisión Nacional de Mujeres Indígenas (CNMI) condenaron enérgicamente el maltrato físico sufrido por una niña emberá en Risaralda. El caso, registrado en video, ha conmocionado al departamento y generado un llamado a la justicia.


El hecho ocurrió el 30 de mayo en la comunidad de Gito Dokabu, Pueblo Rico. Un video muestra la agresión a la menor de 17 años, quien fue atada y golpeada brutalmente por dos hombres, hasta perder el conocimiento. Esta situación ha expuesto la vulnerabilidad de las comunidades indígenas y la necesidad de mayor protección.


El ICBF confirmó la atención inmediata a la menor, brindándole acompañamiento psicosocial con la ayuda de un intérprete. Se implementó un proceso administrativo para restablecer sus derechos y se le otorgó una medida de protección. La CNMI, por su parte, calificó la agresión como una violación a los derechos humanos, exigiendo justicia y recalcando que ninguna práctica cultural justifica la violencia. El Gobernador Patiño anunció acciones legales contra los agresores.


El video evidencia la gravedad del maltrato y ha generado una ola de repudio en la región. Las autoridades investigan las causas del hecho, buscando identificar a los responsables y determinar si se trata de un caso aislado o una problemática mayor dentro de la comunidad. Las consecuencias podrían implicar severas sanciones para los agresores y la implementación de programas para prevenir futuros actos de violencia contra la población indígena. La indignación colectiva busca garantizar la protección integral de los niños y niñas en la región.