Por: Gustavo Puentes

En su primera aparición pública, el Papa León XIV exhortó a una paz justa en Ucrania y un alto al fuego en Gaza, marcando un enfoque diplomático en su pontificado.

El domingo, el recién electo Papa León XIV, en un emotivo discurso, instó a los líderes mundiales a buscar soluciones pacíficas y duraderas a los conflictos en Ucrania y Gaza. Desde la Ciudad del Vaticano, el pontífice expresó su profunda preocupación por las situaciones de violencia y la urgencia de asistencia humanitaria para las víctimas civiles.

León XIV, el segundo papa de origen latinoamericano, se dirigió a los "grandes del mundo", pidiendo no solo el cese de las hostilidades sino también la liberación de los rehenes en Gaza. "Es un llamado a la conciencia de la humanidad", afirmó, subrayando la necesidad de una intervención global que priorice la vida y la dignidad humana sobre los intereses políticos.

Durante su discurso, el Papa hizo hincapié en la importancia de una paz "justa y duradera", especialmente en Ucrania, donde el conflicto ha causado estragos y desplazamientos masivos. La intervención del Papa busca influir en una resolución pacífica que respete la soberanía y los derechos de todos los involucrados.

Este primer mensaje del Papa León XIV es visto como un indicativo de la dirección que tomará su papado, con un enfoque centrado en la paz y la moderación, siguiendo los pasos de su predecesor, el Papa Francisco. La comunidad internacional ha recibido positivamente su llamado, esperando que contribuya a reanudar diálogos y negociaciones en ambas regiones. Este enfoque podría ser crucial para mitigar futuras escaladas de violencia y fomentar un ambiente de cooperación internacional.